La intención de Coromina es reflexionar sobre el propio soporte. Todas las series que en los últimos años ha desarrollado giran en torno a la idea de deconstrucción, tanto en la estructura de la obra artística como en el hecho icónico transcendental. De esta manera, las formas se producen a través de lo ya asumido y las imágenes devienen de un espectro inherente a nuestra cultura occidental abarrotada de una inmensidad de obras de arte que se generan en torno a un formato, un canon o, en general, a una estructura no suficientemente replanteada.
Rafael Doctor escribe en el texto que realizó para su exposición de la Universidad de Murcia: “No importa si lo que tenemos enfrente es pintura, escultura o instalación; eso es lo de menos. En este caso nos situamos ante un ejercicio que pretende jugar y dialogar con los mínimos elementos posibles, desde un sentido de la desestructuración de los formatos tradicionales que parecen revelarse en la consecución de un lenguaje más transcendente y puro donde sobran las imágenes o las historias”.
En el catálogo de su exposición en Zargoza Francisco Carpio escribía: “Coromina ha venido planteándose igualmente en su pintura esta expansión de sus fronteras y límites, convirtiendo asimismo muchas de sus obras en otro órgano en el que sus elementos plásticos también se contraen y dilatan, y en ocasiones pueden llegar casi hasta explotar. Una doble expansión por cuanto que su obra se cuestiona no sólo los límites puramente físicos de la pintura, sino también la propia concepción procesual de la práctica pictórica”.
Guillermo Solana en el texto del catálogo de Itinerarios, de la Fundación Marcelino Botín escribía: “…la confrontación de la pintura consigo misma, que es el gran tema de la obra de Roberto Coromina, se verifica en un terreno típicamente postmoderno, y cargado de implicaciones culturales y sociológicas. Su investigación puede verse como una apropiación de los grandes iconos de la tradición pictórica”.
Una instalación realizada con esculturas de acero colgantes se mueven al paso del espectador invitándoles a ser protagonistas. Estas esculturas trasladan las pinturas a las tres dimensiones; realizadas con planchas de acero dobladas, consiguen reflejar y deformar el entorno.
Las imágenes en movimiento del vídeo reflexionan sobre la dedicación necesaria para la materialización pictórica y se establece un paralelismo con la ejecución de un complicado pasatiempo. El título de la exposición 1000, es también el título del vídeo presentado y hace referencia al acto repetitivo y tedioso necesario para lograr las imágenes y obras que componen esta serie. Estas obras se necesitan y se complementan, conviviendo en armonía unas con otras. Con ellas, Roberto Coromina nos hace partícipes de su investigación, de su intento de que la pintura confunda a nuestra percepción y de definir sus nuevos límites.
SOBRE ROBERTO COROMINA
Roberto Coromina nace en Remolinos, Zaragoza, en 1965. En la actualidad vive y trabaja en Madrid. Se licencia en Bellas Artes por la Facultad Sant Jordi de Barcelona en 1989. Amplía su formación con diferentes becas como la Beca Erasmus en la Winchester School of Art en Gran Bretaña, la Beca de intercambio en la Ecole Nationale Superieure des Beaux-Arts de Paris, o la beca de la Generalitat de Cataluña con la que se traslada a Nueva York. Allí vive desde 1994 hasta 1998, año en el que vuelve a Madrid para disfrutar de la Beca de la Casa de Velázquez de la Diputación Provincial de Zaragoza. Regresa a Nueva York en 2003 con una beca de la Fundación Marcelino Botín donde cumple el programa del ISCP (International Studio Curatorial Program) y en 2006 para realizar una residencia en el Triangle Artists´ Workshop.
Su primera exposición individual la realiza en el Museo de Zaragoza en 1986. Hasta la actualidad ha expuesto individualmente en más de treinta ocasiones: en Magnam Projects de Nueva York, Guido Carbone de Turín o Fernando Serrano de Huelva, entre otras galerías. Participa en numerosas exposiciones colectivas en Estados Unidos, Japón, Inglaterra, Italia, Francia y España. Asiste a ferias como ARCO, Artíssima, Art Madrid o Scope Miami.
Sus obras forman parte de los fondos artísticos de instituciones como la Diputación Provincial de Zaragoza, la Fundación Caixa de Pensions de Barcelona, la Fundación UNICAJA de Málaga, la Fundación Marcelino Botín, el Gobierno de Cantabria o el MUSAC en León.
"1000” (Escultura-Instalación, Pintura y Vídeo).
03 de Febrero al 10 de Marzo 2012
Inauguración 03 de Febrero a las 20.30h con la presencia de la artista.
AJG Contemporary Art Gallery.
Pasaje Francisco Molina 17, Sevilla. (Pasaje Villasis)
www.ajggallery.com