Fernando Franco: «Esta segunda Bienal será más difícil de entender, pero más interesante»

Biacs2

Fernando Franco está contento porque acaba de firmar el convenio con el Ayuntamiento hispalense, que le reportará 600.000 euros a la Fundación que preside. «Es el más importante, porque nos da credibilidad de cara a nuevos posibles colaboradores respecto al futuro de la Bienal de Arte» -comenta-, aunque reconoce a continuación que «estaríamos mucho más contentos si este convenio lo hubiéramos firmado el año pasado». También destaca el apoyo de Caja San Fernando y la exposición paralela que realizará.

Fernando Franco está contento porque acaba de firmar el convenio con el Ayuntamiento hispalense, que le reportará 600.000 euros a la Fundación que preside. «Es el más importante, porque nos da credibilidad de cara a nuevos posibles colaboradores respecto al futuro de la Bienal de Arte» -comenta-, aunque reconoce a continuación que «estaríamos mucho más contentos si este convenio lo hubiéramos firmado el año pasado». También destaca el apoyo de Caja San Fernando y la exposición paralela que realizará.

-¿En qué se parecerá la Biacs2 a la Biacs1 y en qué no?

-Se parecerá en que está organizada por la misma fundación, sigue el mismo patrón de un comisario independiente de gran calidad. La primera bienal tuvo el primer comisario que podíaa tener y ahora tiene el mejor que podría tener la segunda bienal. Se parece también en que buena parte de la exposición se va a celebrar en el Monasterio de la Cartuja, pero se va a diferenciar en que una parte de esta segunda edición se va a celebrar en las Atarazanas. También se va a concentrar todo un poco más en el monasterio, no se va a abarcar tanto espacio. Se va a diferenciar también en que, al tener la experiencia de la primera, la gestión va a ser mejor. Se va a diferenciar también en que en esta edición se va a contar con un apoyo decidido de las administraciones. En la primera recibimos un cierto apoyo pero más bien de «a ver cómo sale esto» y llegando bastante tarde.

-¿Existe el mismo apoyo de la sociedad civil y del empresariado sevillano a esta Bienal?

-Tenemos más que en la primera pero todavía nos faltan. Tenemos que ser capaces de modificar la visión de una parte importante del empresariado de esta ciudad y hacerles ver la proyección mediática que va a tener la Bienal. Hemos sido tímidos en el arranque esperando el apoyo municipal y ahora ya iremos más seguros y daremos un empujón.

-¿Cuánto les falta para cubrir el presupuesto de 2,5 millones?

-Nos falta medio millón de euros para ir justos. Lo que sí vamos a hacer, en todo caso, consigámoslo o no, es una bienal a la medida del presupuesto que tengamos. Lo que no queremos es que la Bienal produzca déficit, como sucedió con la primera. Lo tenemos claro.

-O sea, que no van a tirar la casa por la ventana…

-No, no la vamos a tirar. Como usted sabe, la Fundación Biacs es una entidad sin ánimo de lucro pero tampoco tenemos ánimo de perder dinero. Eso ya lo saben el comisario y los miembros de la fundación. Cuanto más fondos recaudemos, lógicamente mejor oferta haremos y más lucida nos quedará la Bienal.

-¿No teme que sea un hándicap para la ciudad el hecho de que el comisario Okwi Enwezor nunca hubiera pisado Sevilla ni supiera nada de ella, antes de ser elegido?

-Yo creo que no. Al final lo que es una Bienal es una gran exposición que sea muy representativa de las vanguardias artísticas y lo que se está haciendo en este momento en todo el mundo en este campo, incluido naturalmente Andalucía y España. No va a ser una exposición de Sevilla sino para Sevilla y en Sevilla, con un tema, «lo desacogedor», que obliga a establecer esa comparación y debate intelectual. Sevilla sólo va a ser el escenario.

 

Dos lemas, dos ideas

-¿No le parece un poco deprimente el lema elegido para este segunda edición, frente a la «alegría de los sueños» de la primera?

-El de la primera era, desde luego, más lúdico, más alegre y seguramente sintonizaba más con la ciudad que acogía la Bienal…

-Precisamente porque Harald Scheemann conocía Sevilla…

-Sí, la conocía muy bien y disfrutó mucho de ella durante la Expo. Yo creo que tanto un lema como otro son válidos. Para Harald Sevilla era un sinónimo de alegría y quiso darle un homenaje a la ciudad a través de ese sentimiento. En este caso, el mensaje será más intelectual y complejo. Muy profundo y nada lúdico, muy intelectual, incluso sofisticadamente intelectual, pero muy interesante.

-¿Será, pues, una Bienal más difícil de entender que la primera?

-Yo creo que va a ser más interesante sin despreciar, por supuesto, la primera. Pero sí, extraerle el contenido a esta Biacs va a exigir un acercamiento más intenso y será más difícil de comprender. Por eso pensamos en producir unas guías de sala que faciliten la comprensión de todas las obras. Aunque advierto que hablo de esto sin saber todavía las piezas concretas que vienen, pero sí la filosofía del comisario. Es un proyecto muy filosófico.

-¿Y no teme que la ciudad le dé la espalda? La primera Bienal, con un discurso menos complejo, no tuvo la acogida en Sevilla que se esperaba…

-Yo no me puedo poner en el cerebro de la gente, pero esto es una carrera de fondo y lo que hay que hacer es dar la oportunidad al sevillano de que se asome a algo que no se ha visto nunca. Si luego, no la quiere aprovechar… Yo, por ejemplo, aprendí muchísimo con la primera, aunque tuve la suerte de que Scheemann me fuera explicando las obras. Eso me supuso incluso un cambio de actitud personal mío ante el arte contemporáneo.Yo creo que el sevillano irá aprendiendo poco a poco el arte contemporáneo.

Espectacular pero menos costosa

-El presupuesto es de 2,5 millones de euros, 300.000 más que en la primera Bienal. ¿en qué se notará?

-Se notará en que estará mejor, aunque me da la sensación de que Enwezor no va a apostar por una exposición tan cara como la de la primera. Sólo el traslado y montaje de la pieza de Richard Serra costó cientos de miles de euros y la pista de «skate de Majerous también fue muy costosa.

-¿Será entonces menos espectacular la BiacsII que la Biacs I?

-Creo que será también espectacular pero menos cara de producir.

-Se rumorea que «como mucho» se invitará a un artista andaluz a participar en la II Bienal. ¿Es cierto?

-La lista de artistas invitadas aún no está cerrada. Enwezor ha mandado ya una relación de artistas para que vayamos trabajando con ella, pero tenemos un compromiso de confindencialidad sobre ese asunto . A finales de abril, el comisario la presentará a los medios.

-¿Cómo van los plazos? La Junta de Andalucía esperará con urgencia el proyecto para ver qué piezas van a ir a las Atarazanas

-No sólo para eso sino también para ver qué piezas se van a quedar en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (Caac), pues el 60 por ciento de la ayuda de la Consejería es para financiar producciones que irán a la Bienal, pero que se quedarán en el Caac. Y eso exige un acuerdo entre el director del Caac, el comisario y el artista que va a producir, un encaje a tres bandas que hay que cerrar cuanto antes. Hasta que no esté claro cuáles van a ser las producciones no se puede avanzar en eso y la Consejería no nos dará la subvención, lo cual nos produce un problema importante de tesorería.

-Más de la mitad del presupuesto procederá de dinero público. ¿No teme que la mayor implicación de las administraciones puede condicionar su espíritu de iniciativa de la «sociedad civil» con el que nació?

-En absoluto. Esto ha sido una iniciativa de la sociedad civil, pero que no se puede realizar sin el concurso de las instituciones públicas: es un proyecto de mucha envergadura. En el acuerdo que hemos firmado con el Ayuntamiento entra un representante de la Corporación en la comisión ejecutiva de la Bienal y nosotros le damos la bienvenida. Me parece bien esa implicaciónen la gestión porque facilita la comunicación. Yo siempre he querido que la Fundación Biacs fuera una fundación muy abierta.

Plataforma «AntiBiacs»

-¿Qué opina de la plataforma «AntiBiacs» que existe en Sevilla y de que Pedro G. Romero, uno de sus integrantes, dirija ahora un Centro de las Artes de Sevilla que depende directamente del ayuntamiento?

-Resulta curioso pero no conozco personalmente a este señor, aunque he leído alguno de sus manifiestos en contra de la Biacs. Lo único que dice es que exige transparencia en nuestras cuentas cuando están auditadas y cualquiera puede venir aquí a verlas y por supeust se las facilitamos a las instituciones que nos apoyan económicamente. Jamás han hablado con nosotros ni nos han pedido nada. Hemos propiciado un encuentro entre el comisario y este señor, en presencia del delegado de Cultura. Lo que pretendíamos era recoger iniciativas de ellos, pero no propusieron ninguna. Me parece bien que haya gente en contra, pero no puedo dar opinión sobre lo que quieren.

13-04-2006

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