«La generación de los 80 fue en el arte la esperanza del cambio» ( Revista Figura )

Portada de la Revista FIGURA, nº0. Primavera de 1983. Autor: Luis Gordillo.

En 1983 nacía en Sevilla la revista «Figura» dirigida por Guillermo Paneque y un grupo de entonces estudiantes de Bellas Artes. La publicación fue respaldada por la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía que se mantuvo en una prudente lejanía de la misma.

En torno a esta publicación se aglutinó la postmodernidad y el grupo de artistas que conformaron la denominada «generación de los 80», entre los que se encontraban el propio Paneque, Rafael Agredano, Curro González, Pepe Espaliú, Abraham Lacalle, Ricardo Cadenas, entre otros.

Veintiún años después, Paco Lara-Barranco, profesor de la Facultad de Bellas Artes y pintor, presentó ayer en la Fundación Cajasol una publicación que analiza lo que supuso «Figura» en el arte de Sevilla y su historia.

Lara-Barranco, que parte de su tesis doctoral para este libro, incluye en él una serie de entrevistas con artistas de esa generación, galeristas y críticos. El autor afirma que «"Figura" cumplió una función social y fue la esperanza del cambio en el arte. Trajo a Sevilla la información de los movimientos de vanguardia que no se hubieran conocido de otra forma».

21 años después de la Revista Figura, de Paco Lara-Barranco

Sin olvidar precedentes como la revista «Separata», Lara-Barranco afirma que «toda aquella movida coincidió con el "boom" de los 80, cuando el gobierno socialista empezó a invertir en cultura y desde fuera nos empezaron a mirar. España entonces se puso de moda».

Para el pintor, actualmente faltan publicaciones y críticos, «pero sí hay mucha gente potente en la creación. Lo que ocurre es que ahora hay de todo y en los 80 fue la explosión. Luego en los 90 hubo un extenso parón y ahora en lo que llevamos de siglo XXI en cuanto a creación artística podemos decir que el resultado es frucífero».

Según el autor de esta publicación, «la vuelta actual a la pintura desenfadada y libre tiene que ver con la transvanguardia del colectivo de "Figura". Los 80 son fundamentales en la historia del arte en Sevilla, aunque eso sí, alguna gente se quedó en el camino y su obra no volvió a interesar», se lamenta.

Sin embargo, reconoce Lara-Barranco que el dinero sigue estando en Madrid, «por eso galerías como Juana de Aizpuru y Pepe Cobo (La Máquina Española), que fueron fundamentales en los 80, se han ido donde hay negocio. Excepto la galería Rafael Ortiz, el resto de las sevillanas tiene poco recorrido. Pero hay salas para exponer, sólo hay que buscarlas. Eso sí, si quieres internacionalidad hay que salir fuera. Todo depende de dónde se quiera llegar», afirma.

4-12-2008 / MARTA CARRASCO. SEVILLA

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