En directo desde Sevilla. Escala Abierta

Miki Leal reproduce en el suelo un cuadro de Friedrich. Foto: Diario de Sevilla.

Creadores del arte contemporáneo andaluz, en directo desde Sevilla. José Miguel Pereñíguez, María Cañas, Simón Zabell y Miki Leal participan en una jornada de puertas abiertas en Espacio Escala.

El oráculo de la muerte del arte contemporáneo, un actor vestido de negro con un tercer ojo pintado en la frente -entre las palabras ora y culo-, da la bienvenida al público de las jornadas de puertas abiertas de Espacio Escala. Mientras amenaza con una porra y recita su poema criticando a los personajes del mundo del arte, María Cañas graba y pregunta si sería oportuno fomentar una Semana Santa alternativa procesionando las obras de la colección de Cajasol. Esta pequeña performance ocupa uno de los cuatro espacios que la galería ha reservado para estas jornadas de creación. "La gente tiene reacciones muy diversas", comenta el oráculo, mientras Cañas le recrimina que tiene "que subir el tono".

En la sala del fondo, Simón Zabell pinta cuadrados grises en las paredes. "Después les haré un marco para simular que estamos en una exposición", comenta. Parece más un obrero que un artista, con el mono blanco lleno de manchas de pintura, pero de eso tratan estas jornadas, de que los visitantes puedan ver cómo trabajan los autores del arte contemporáneo. "A veces tiene que venir alguien de fuera para sacarnos del estudio, de lo que tenemos planeado", asegura, "aunque es un riesgo tremendo hacer algo así".

En el otro extremo de la galería, José Miguel Pereñíguez se afana en cortar trocitos de cinta adhesiva mientras a su alrededor todo es caos: cuadros en el suelo, cartulinas sobre la mesa, e incluso una bicicleta. Pretendía recrear su estudio, pero finalmente ha vencido el desorden. "Por lo menos eso se gana en curiosidad", dice esperanzado, "así se ve de dónde salen mis obras".

Mientras, en el suelo de la cuarta sala de Espacio Escala, se va apreciando poco a poco una reproducción de El viajero contemplando un mar de nubes, de Friedrich. Su autor, Miki Leal, tiene pocas esperanzas de acabar el cuadro porque el pastel no agarra bien en el satinado de la galería. "Me da igual", bromea, "lo que me gusta es lo chungo de pintar en el suelo. Soy como los hippies de la calle, aunque ellos pintan la Inmaculada de Murillo con tizas".

Estos jóvenes artistas terminaron ayer sus creaciones, pero los resultados pueden verse hasta las 21:00 de hoy, cuando serán destruidos para preservar su carácter efímero.

María Pachón / Sevilla

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