Doce artistas, doce miradas a la identidad . ESPACIO ESCALA

Identidades en el Espacio Escala

Espacio Escala acoge una muestra con obras de Espaliú, García-Alix o Guillermo Paneque l 'Identidades'. Espacio Escala (Cardenal Cisneros, 5). Hasta el próximo 24 de mayo. Entrada gratuita. Espacio Escala, de Cajasol, acoge hasta el 24 de mayo Identidades, una muestra que bajo el cuidado de Juan María Vélez Alvez reúne una docena de obras de la colección de la entidad, todas ellas relacionadas con las reflexiones de los distintos artistas sobre sí mismos y abiertas a las lecturas que los espectadores quieran aplicar.

 "La conciencia del artista como personaje de relevancia dentro de nuestra sociedad ha resultado un tema recurrente desde el siglo XVI (…)¿Qué sería del creador sin su inherente cuota de narcisismo?", escribe Vélez Alvez en el catálogo de la muestra.

La exposición está dividida en cuatro ámbitos. El primero tiene que ver con los procesos de la memoria, con los bagajes y las recapitulaciones que desembocan en un presente que nunca es tan claro como el pasado. Dos obras tiene sitio aquí. En una, Paka Antúnez propone un recorrido irónico y explícito por su currículum a través de una instalación titulada Autobiografía en blanco y negro que recoge diplomas y títulos, reales y falsos, como algunos -firmados como siempre por el Rey y con formato académico- en los que se reconoce la capacidad de la artista para ser "fuerte y sensible" o para superar sus propias limitaciones. La otra obra, "más dramática", es un vídeo del argentino Sebastián Díaz Morales que recoge ensoñaciones vinculadas a varios recuerdos del autor.

La segunda parte de la muestra, centrada en "la visión del artista sobre sí mismo", propone un diálogo entre dos autorretratos de tradiciones bien distintas: Tenemos algo en común, una fotografía en blanco y negro de Alberto García-Alix realizada en 1997, de madrugada, tras haber llegado a casa -según explicó el autor al comisario- con una intensa sensación de vacío tras una noche flamígera; y un Autorretrato de 1901 de José Jiménez Aranda, que se pintó entre pinceles, lienzos y otros materiales de trabajo. El tercer apartado del recorrido es más introspectivo y también "el más duro" de los recogidos en Identidades, explica Vélez Alvez. "Hay descripciones psicológicas, algunas de ellas próximas al pensamiento existencialista". Éstos son los casos, dice el comisario, de Antonio Saura, de quien se expone un Autorretrato de 1956, y de Paco Molina, del que se incluye un óleo titulado Personaje y fechado en 1966. Story for Guillermo (1986), una obra en la que Pepe Espaliú, que murió enfermo de sida, muestra una visión de la vida como martirio, y 101 personajes (1978), de Alfonso Fraile, completan este tramo.

El cuarto y último, más lúdico y desinhibido, está compuesto por obras de Ángeles Agrela (una de su Serie camuflaje, de 1999), Risk Hazekamp (Wanted, 1999), Mercedes Carbonell (Primavera, 2001) y Guillermo Paneque (El profeta, 1986). Este multidisciplinar artista sevillano, que actualmente reside en Madrid, participó ayer en las Sesiones Nocturnas de Espacio Escala, donde intercambió impresiones con los espectadores sobre la recepción de la obra de arte y los diferentes roles que puede asumir el creador en la sociedad actual.

Diario de Sevilla 21.04.2009
Francisco Camero

www.diariodesevilla.es

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