«Cada imagen abre una puerta a un mundo diferente, aunque toda la exposición tiene un hilo conductor psicológico… ¿Cual? Todas las obras hablan de lo mismo: de la repetición, lo artificial, lo que parece que está bien y no lo está, del caos, la soledad…». Martín Lara intenta explicar con palabras un proyecto que quiere ir más allá del lenguaje, más allá del corsé de la razón para dirigirse a los sentimientos.
«’Landpartie’ es un proyecto que pone a prueba sentimientos y emociones propias, personales, pero inducidos por nuestro entorno. Por tanto pone interrogantes, no ya al sujeto pensante, sino al sujeto ‘sintiente’ inscrito en la hipermodernidad», añade la autora en el texto que acompaña a la exposición. Martín Lara también matiza que el título se refiere a la expresión alemana que se traduciría como ‘salir de un sitio’. Puede ser el efecto que causen en el espectador las imágenes de Martín Lara.
Huecos en la memoria
«Percibimos las cosas como partes o elementos aislados, es decir, se pueden reorganizar. Visualizamos un fotograma que está pasando ante nuestros ojos en ese mismo momento, pero no visualizamos ni el antes ni el después, sólo el ahora, el patrón existe sólo en nuestra memoria», apostilla la artista. Justo esos «huecos» entre una imagen y otra constituyen una de las claves del discurso de Martín Lara.
De este modo, la creadora malagueña presenta sus credenciales en la décima edición de PhotoEspaña y comparte catálogo con figuras como Eugene Smith, Robert Smithson, Javier Vallhonrat o Catalá-Roca.
Martín Lara tampoco olvida el salto que supone la inclusión de sus obras en el evento madrileño. «PhotoEspaña es lo más importante que hay en el país en lo relativo al vídeo y la fotografía y por eso lo que haces alcanza mayor repercusión», concluye la creadora, un poco nerviosa.
A.J. López